Ángela
10-12-2021
Los fascistas catalanes
Que una familia, en España, tenga que pedir a la justicia que su hijo de cinco años reciba ¡el 25%!, de clases en español en una escuela pública, se las trae. Que la justicia diga que tiene razón y que otras familias, la dirección del colegio, y mismo gobierno autonómico, se nieguen a aceptarlo, se las trae con abalorios. Pero que fascistas de la peor calaña amenacen con apedrear la casa familiar, o pidan que se aisle a un niño de cinco años en su propio colegio, es de juzgado de guardia.
Aunque parezca mentira eso está ocurriendo ahora mismo. De hecho, esta misma tarde unos trescientos fascistas se han manifestado cerca del colegio, contra la decisión judicial, o sea, en contra de los derechos del niño..
No ha salido ni dios a defender a la criatura. Los fascistas en la calle y los cobardes en casa.
Lo que ocurre en España es algo insólito. En ningún país del mundo ocurre nada igual: que los niños no puedan recibir enseñanza en su idioma. Eres español, pero no puedes estudiar en español en España. Dile esto a un francés, un inglés, un finlandés, y se le salen los ojos de las órbitas.
El asunto viene de lejos, no es de ahora. Se han sucedido gobiernos de izquierda y de derecha que han permitido que la situación llegue a este extremo.
Culpa tienen todos ellos, pero no se libran de culpa los ciudadanos afectados que han sido incapaces, hasta la fecha, de defender mínimamente sus derechos ante atropellos como éste.
Y no es una cuestión sólo de idioma, es de dignidad. Aguantan carros y carretas, sin ni siquiera percatarse de que los están tratando como ciudadanos de segunda. O sí, se han dado cuenta, pero son incapaces de enfrentarse a estas fechorías porque ellos mismos se consideran ciudadanos de segunda. Si estáis esperando que el gobierno os ayude, o sea, un milagro, vais apañados.
Para que no se nos olvide:
El colegio en cuestión es el Turó del Drac (Cerro del Dragón) de Canet de Mar (Barcelona).
El Consejero de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, envió una carta a todos los centros pidiendo que, pese a la sentencia, los docentes no dieran ninguna clase en español.
Jaume Fàbrega, un exprofesor de Turismo de la Universidad Autónoma de Barcelona, escribió en Twitter: «Me apunto a ir a apedrear la casa de este niño. Que se vayan fuera de Cataluña. No queremos supremacistas castellanos que nos odien».
Albert Donaire, un zumbado con pistola (es mosso de escuadra) escribió también en Twitter: «Este niño se tiene que encontrar absolutamente solo en clase. En las horas que se hacen en castellano, los otros niños deberían salir de la clase. Reaccionemos o nos matan la lengua».
La manifestación ha sido convocada por el Sindicato de Estudiantes de los Países Catalanes (SEPC) y la Intersindical (sindicato separatista que dirige Carles Sastre, condenado hace años por el asesino de Bultó). En la marcha también había dirigentes locales de Junts per Catalunya (JxCat), la CUP y ERC