Pablo Pablito Pablete
Ángela
22-1-2021
En la entrevista tan comentada que Gonzo en el programa Salvados le hizo al vicepresidente segundo del gobierno Pablo Iglesias, en un momento dado habla de Puigdemont como de un exiliado político; “lo del otro”, refiriéndose al rey Juan Carlos, es una fuga. Si un vicepresidente del gobierno se refiere al anterior Jefe de Estado como “el otro”, a partir de este momento Pablo Iglesias es Pablo Pablito Pablete, como diría José María García.
Dice Pablo Pablito Pablete que Puigdemont, ex presidente de la Generalidad de Cataluña, procesado y declarado en rebeldía por el Tribunal Supremo, que salió huyendo escondido en el maletero de un coche y que anda por ahí viviendo en una casa que cuesta 5000 euros al mes mientras sus coleguitas están en la cárcel,y los españoles le pagamos una pasta para que disfrute de su nueva vida, de este tipo dice Pablo Pablito Pablete que es un exiliado como los exiliados que tuvieron que saliar de España después de la guerra huyendo de la dictadura. Comparar a Puigdemont con los exiliados es de miserables, es vomitivo.
«Pregunta: ¿Considera realmente a Puigdemont un exiliado, como se exiliaron muchos republicanos durante la dictadura del franquismo? ¿Los puede comparar?
Respuesta del vicepresidente del gobierno: Pues lo digo claramente, creo que sí».
Sabe poco, muy poco Pablo Pablito Pablete de lo que significó para familias enteras salir cruzando los Pirineos, con lo que llevaban puesto. Muchos sin zapatos, sin abrigo, sin nada para comer. El tipo que se pasa la vida hablando de memoria histórica, no tiene ni idea del sufrimiento de esas miles de personas que tras cruzar los Pirineos se encontraron con los campos de concentración (sería un eufemismo llamarlos de refugiados) donde los metieron los franceses. En las playas del Mediterráneo como las de Argelés se amontonaban familias durante meses sin ninguna posibilidad de escapar del sol y del frío. En esas condiciones infernales nacieron muchos niños, un amigo entre ellos. Su madre dio a luz en aquellas playas sin apenas cobijo. En el exilio francés murieron sus padres. Otros partieron hacia un mundo desconocido, cruzaron el Atlántico hasta llegar a México, Argentina y otros países. Muchos no volvieron.
Mejor suerte tuvo el abuelo de Pablo Pablito Pablete. Condenado a muerte, en cuatro años y medio estaba en la calle con la ayuda de altos cargos falangistas que le colocaron en el Ministerio de Trabajo. Vivió muy bien dentro del régimen franquista, y eso que durante la guerra había sido presidente de un tribunal militar que condenó a muerte a soldados por distintos motivos. Otros por mucho menos fueron fusilados o pasaron 20 años en la cárcel. Le fue muy bien en la vida, ya ves, de la cárcel al barrio Salamanca, que ya por aquellos años era el de los pijos. Los hay que saben lo que hay que hacer para sobrevivir, si hay que escribir loas a Franco, se escriben, lo que haga falta con tal de sobrevivir; comprensible desde luego, pero presentarlo como un héroe, no es admisible ni siquiera siendo su nieto. La vida de su abuelo no tiene nada que ver ni con los refugiados que escaparon como pudieron, ni mucho menos con los que se …